Liliana Heker celebró sus 80 años, en la Feria del Libro: no más talleres y nueva novela
La célebre cuentista repasó su carrera en un emotivo encuentro en La Rural. Tiene en marcha una nueva ficción.
Liliana Heker en la Feria del Libro. Fotos Cleo Bouza / Verónica Bellomo para Fundación El Libro/ GentilezaSiempre hay un motivo para celebrar. Sobre todo, si se trata de hacerlo rodeada de afectos: los amigos de siempre, familiares, alumnos, lectores, admiradores, curiosos y también (des)conocidos.
“Celebrando a Liliana” es el evento que faltaba en la Feria del Libro para homenajear los 80 años de vida de Liliana Heker, más de seis décadas de los cuales dedicó a la literatura como excepcional escritora y ensayista y también como “maestra” o formadora de grandes escritores contemporáneos.
La sala
Alfonsina Storni (Pabellón Blanco) fue testigo del emotivo homenaje que contó
con la participación del escritor Enzo Maqueira, quien ofreció de presentador,
la periodista cultural Verónica
Abdala y Julieta Obedman, editora de las obras de Heker, quienes
repasaron su prolífica carrera: sus inicios, sus grandes obras, la polémica con
Julio Cortázar y su vocación docente de “fabricar” escritores que se ganaron un
lugar en historia de la literatura argentina.
Además, la
recientemente declarada Personalidad Destacada de la Cultura de la Ciudad de
Buenos Aires adelantó que está escribiendo su nueva novela aunque no reveló
cuál es el tema ni el género que está desarrollando pero aseguró que no dará más talleres después
de 40 años de haber formado escritores consagrados. Samanta Schweblin,
Guillermo Martínez, Pablo Ramos, Silvia Schujer, y Romina Doval, entre otros,
pasaron por su taller de escritura.
Homenaje a Lili
Abdala
rompió el hielo con un emotivo discurso dedicado a la excepcional escritora,
quien además fue su mentora. “A sus lectores, y así como a sus alumnos, parece
haberles transmitido ante todo una convicción: la de la pasión que le da
sentido a su vida”, ponderó la periodista cultural, que trabajó en
Clarín, y autora de Café literario.
A los 16, Heker mandó
una carta y un poema a la emblemática revista literaria El
grillo de papel, fundada y dirigida por Abelardo Castillo,
quien le dijo que el poema “era pésimo” pero la reconoció como escritora y le
propuso ser Secretaria de Redacción. Allí colaboraron nada menos que Julio Cortázar, Carlos Fuentes,
Augusto Roa Bastos, Juan Goytisolo y Ernesto Sabato, entre otros grandes
escritores.
Entre 1961
y 1974 trabajó como Secretaria de Redacción de El escarabajo de oro, revista
que fundó con Castillo. Allí publicaron sus primeras obras autores como Ricardo Piglia, Sylvia
Iparraguirre, Humberto Costantini, Miguel Briante, Jorge Asís, Alejandra Pizarnik,
Isidoro Blaisten, entre otros.
En
1966 publicó Los
que vieron la zarza, su primer libro de cuentos. Más tarde
siguieron Acuario (1972), Un
resplandor que se apagó en el mundo (1977) y Las
peras del mal (1982), entre otros. En 1987 publicó Zona
de clivaje, su primera novela, y más tarde escribió El
fin de la historia, en 1996. Las hermanas de Shakespeare,
su primer ensayo, fue lanzado en 1999.
Luego
siguieron las palabras de Julieta Obedman, editora de libros de ficción a cargo
de la edición de Alfaguara Argentina, del grupo Penguin Random House, donde se
publican los libros de Heker.
“Mi
trabajo como editora es hermoso, no lo cambiaría por nada, y la presencia de
Liliana en mi vida va mucho más allá del trabajo. Es alguien recomendable
frecuentar”.
Obedman
recordó que se conocieron en el Darling Tennis Club, donde juega Heker. En ese
momento, Alfaguara presentaba Antología de cuentos de tenis, un
libro de Guillermo Martínez con prólogo de Heker.
Trabajaron
juntas cuando Obedman estaba en editorial Santillana. “Lo primero que hicimos
fue un volumen de cuentos que había salido en formato grande y lo pasamos a
bolsillo. Me acuerdo que el primer intercambio fue la tapa”.
“En
2014-15 me incorporé a Alfaguara y heredé a Lili como autora. Tuve el
privilegio de trabajar con alguien como ella con su trabajo, con su escritura,
con su arte, con su talento es un lujo”, enfatizó la editora de Cuentos
reunidos (2016), el libro que recopila los cuentos de Heker –con prólogo de
Schweblin- y La trastienda de la escritura (2019),
entre otras obras.
Por su
parte, Maqueira dijo que la mejor decisión que tomó fue haber pasado por el
taller de Heker. El escritor sorprendió al señalar que Liliana no le caía bien al
principio.
“Siempre
fui muy cortazariano. La primera noticia que tuve de Liliana fue por la famosa
polémica con Cortázar. Me acuerdo haberla visto en un documental hablando sobre
la polémica de los escritores exiliados. Obviamente, quería defender a Julio,
mi amigo, a quien nunca conocí pero era mi amigo: cómo se meten con Julio”,
añadió.
“Me
acuerdo cuando le dije que la conocía por lo de Cortázar y ella automáticamente
me desarmó mi mala onda pequeña con su sonrisa y su amabilidad. Me callé, no
dije nada y me explicó lo de Cortázar. Aparte eran amigos”, deslizó el autor de
la novela Electrónica.
Y
cerró: “Lo que aprendí en los talleres de Liliana no fue un método sino un
compromiso con la escritura. El verdadero acto creativo está en la reescritura
y no necesariamente en la escritura. Eso necesariamente me cambió todo: fue un
antes y un después”.
Según Maqueira, los cuentos La fiesta ajena, La noche del cometa y Don Juan de la casa blanca, pertenecientes al libro Cuentos Reunidos, una recopilación de los cuentos de Heker publicado por Alfaguara en 2016, “son una gran lección de vida y de literatura”.
“No me la creo”
Por
último, el turno de la homenajeada, visiblemente emocionada después de tantos
elogios. Lili agradeció estar rodeada de afectos: su esposo Ernesto, su
hermana, su amiga Nora del “primero superior” y de los escritores Guillermo
Martínez, Inés Fernández Moreno y Alejandra Kamiya, de la “escuela Heker”,
presentes en la sala para homenajear a su maestra literaria.
“Las
cosas que me están pasando últimamente me las perdono porque tengo 80 años.
Cuando uno tiene esa edad todos le perdonan haber polemizado con Cortázar. Te
perdonan todo”, ironizó, entre risas.
“La
palabra celebración me impresiona un poco. ¿Saben por qué me perdono todo?
Porque estoy escribiendo”, -reveló Heker, y continuó-: “Cuando estoy
escribiendo se me van todas la ínfulas, tengo las mismas inseguridades: ¿Será
una novela esto? ¿Valdrá la pena? Me siento en la misma búsqueda que me sentí
con todos los libros y los cuentos que escribí en mi vida”.
También,
celebró el vínculo que se genera con las personas que fueron a sus talleres de
escritura. “Hoy son maravillosos colegas y amigos. Ver eso crea un vínculo
totalmente distinto de todos los otros vínculos. Es algo muy hermoso”, enfatizó
la autora de Cuentos reunidos.
Heker
anunció que no dará más sus clínicas de escritura. También reveló que la
pasó mal en pandemia, por eso se dedicó a recuperar su energía, aunque aclaró
que siempre estará cerca de sus ex alumnos.
“A la
última promoción lloraba cuando les anuncié que no les iba dar más taller. Fue
terrible. Ernesto (su marido) me decía: estás dejando una manada de huérfanos”, dijo entre
risas.
Nueva
novela
Por
último, reveló el secreto que muy pocos conocían. “Me preguntaban: ¿podemos
decir que estás escribiendo una novela? Sí, pueden decirlo. Es toda una nueva
aventura para mí en esta etapa de mi vida estar trabajando en una novela.
Trabajé en una etapa muy complicada”.
“Lo
que escribí durante esta época más bien que caótica era confuso. No estoy tan
acostumbrada a la confusión, uno siempre tiene una experiencia nueva. La vida
nunca se agota, esta vez tuve que enfrentarme con la confusión”, expresó la
prestigiosa escritora, Primer Premio Nacional de Literatura, en Cuento y Relato
(2014 – 2017).
“Sigo entendiendo que la escritura es una aventura de la que en este momento ustedes saben tanto como yo. ¿Qué va a resultar de eso? No lo sabemos, pero me hace sentir maravillosamente bien estar escribiendo”, concluyó. PC
Maxi kronenberg - Clarín Cultura
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